COMPARECENCIA DE LA SECRETARIA DE ESTADO DE COOPERACIÓN INTERNACIONAL, SORAYA RODRÍGUEZ RAMOS, ANTE LA COMISIÓN DE COOPERACIÓN INTERNACIONAL PARA EL DESARROLLO DEL SENADO, PARA LA PRESENTACIÓN DEL PLAN ANUAL DE COOPERACIÓN INTERNACIONAL 2009.
(BOCG. núm 184, de 29 de junio de 2009)
(…)
Finalmente, me pregunta el senador Guillot por la actitud de la Secretaría respecto de la situación de Honduras. Tengo que decirle, tanto a él como a la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, que ha hecho referencia a esta situación al principio de su intervención, que, lamentablemente, cuando se produce un golpe de Estado como el que se vivió ayer en Honduras la confusión es grande respecto de la situación y lo que va a pasar. En primer lugar, como muy bien saben, el Gobierno ha condenado, como no podía ser de otra forma, al igual que han hecho todas las fuerzas políticas aquí representadas, el golpe militar en Honduras. Hacía mucho tiempo que no asistíamos a un golpe militar en la región de América Latina. Se han consolidado y conseguido objetivos importantes desde el punto de vista político, democrático y de la estabilidad en la zona y, desde luego, manifestamos un rotundo rechazo y hacemos un llamamiento a que el orden democrático se reponga lo antes posible.
Dicho esto, indudablemente, ayer vivimos una gran confusión, aunque la situación fue muy diferente en la capital que en otras zonas del país. Desde la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional lo primero que hicimos fue intentar ponernos en contacto con [Elena Gutiérrez Lasuen] la coordinadora de la OTC en Honduras y con [Álvaro Ortega Santos] el responsable del centro cultural. Yo intenté hablar con la coordinadora, Elena, pero no pude hacerlo porque en seguida se cortaba la comunicación ya que comenzaron los apagones y el corte de electricidad en la capital. Sin embargo, la directora general de América Latina, Consuelo Femenía -lo sé, porque estábamos las dos hablando por teléfono para ver quién podía contactar cuanto antes-, sí consiguió mantener una conversación con ella. Elena nos transmitió que desde la OTC se estaba poniendo en contacto con todo el personal y con el importante número de ONG que tenemos en la zona y que, a pesar de estar viviendo una situación de gran confusión, todos estaban bien. Yo pude hablar con el director del centro cultural, que no estaba en la capital sino un poco más al norte, y también me transmitió lo mismo: que en la zona en la que se encontraba apenas había alguna situación excepcional -suele pasar por ser una zona más rural-, y que también él estaba, junto con la coordinadora, haciendo el esfuerzo de contactar con todo el personal de las ONG que tenemos en Honduras.
En cuanto a cuál va a ser la postura que adoptemos, indudablemente habrá que esperar a ver cuáles son los acontecimientos. Vamos a trabajar, junto con el resto de la comunidad internacional, por que la legalidad se reponga de forma inmediata y no se pueda consolidar este golpe militar ni un Gobierno militar en Honduras. Simplemente les diré que hagamos lo que hagamos tendremos muy en cuenta esta realidad: Honduras es el segundo país con el índice de desarrollo humano más bajo de la región centroamericana. Según los datos del 2007, de cada 100 hogares 60 viven por debajo de la línea de la pobreza y 35 de cada 100, en la pobreza extrema. Desde luego, como siempre sucede, estas cifras se agravan en el ámbito rural, donde 65 de cada 100 hogares viven en la pobreza y 52, en la pobreza extrema. A partir de eso, no les voy a indicar los índices de salud, alimentación, malnutrición infantil...
Por lo tanto, en este marco adoptaremos las medidas necesarias para poder manifestar y mantener una línea coherente de Gobierno, de rechazo absoluto a un golpe militar en Honduras y al establecimiento de un Gobierno dictatorial, pudiéndolo compaginar con el número de hombres, mujeres y niños que en estas condiciones se benefician de la cooperación internacional. Como muy bien saben ustedes, en América Latina somos los segundos donantes de la región, situándonos solo por detrás de los Estados Unidos y por delante de la Unión Europea en su conjunto. Por lo tanto, en este caso, nuestra presencia y las decisiones que tomemos al respecto son de vital importancia y de consecuencias directas para muchas personas. Creo que le he contestado a todo.
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(BOCG. núm 184, de 29 de junio de 2009)
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Finalmente, me pregunta el senador Guillot por la actitud de la Secretaría respecto de la situación de Honduras. Tengo que decirle, tanto a él como a la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, que ha hecho referencia a esta situación al principio de su intervención, que, lamentablemente, cuando se produce un golpe de Estado como el que se vivió ayer en Honduras la confusión es grande respecto de la situación y lo que va a pasar. En primer lugar, como muy bien saben, el Gobierno ha condenado, como no podía ser de otra forma, al igual que han hecho todas las fuerzas políticas aquí representadas, el golpe militar en Honduras. Hacía mucho tiempo que no asistíamos a un golpe militar en la región de América Latina. Se han consolidado y conseguido objetivos importantes desde el punto de vista político, democrático y de la estabilidad en la zona y, desde luego, manifestamos un rotundo rechazo y hacemos un llamamiento a que el orden democrático se reponga lo antes posible.
Dicho esto, indudablemente, ayer vivimos una gran confusión, aunque la situación fue muy diferente en la capital que en otras zonas del país. Desde la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional lo primero que hicimos fue intentar ponernos en contacto con [Elena Gutiérrez Lasuen] la coordinadora de la OTC en Honduras y con [Álvaro Ortega Santos] el responsable del centro cultural. Yo intenté hablar con la coordinadora, Elena, pero no pude hacerlo porque en seguida se cortaba la comunicación ya que comenzaron los apagones y el corte de electricidad en la capital. Sin embargo, la directora general de América Latina, Consuelo Femenía -lo sé, porque estábamos las dos hablando por teléfono para ver quién podía contactar cuanto antes-, sí consiguió mantener una conversación con ella. Elena nos transmitió que desde la OTC se estaba poniendo en contacto con todo el personal y con el importante número de ONG que tenemos en la zona y que, a pesar de estar viviendo una situación de gran confusión, todos estaban bien. Yo pude hablar con el director del centro cultural, que no estaba en la capital sino un poco más al norte, y también me transmitió lo mismo: que en la zona en la que se encontraba apenas había alguna situación excepcional -suele pasar por ser una zona más rural-, y que también él estaba, junto con la coordinadora, haciendo el esfuerzo de contactar con todo el personal de las ONG que tenemos en Honduras.
En cuanto a cuál va a ser la postura que adoptemos, indudablemente habrá que esperar a ver cuáles son los acontecimientos. Vamos a trabajar, junto con el resto de la comunidad internacional, por que la legalidad se reponga de forma inmediata y no se pueda consolidar este golpe militar ni un Gobierno militar en Honduras. Simplemente les diré que hagamos lo que hagamos tendremos muy en cuenta esta realidad: Honduras es el segundo país con el índice de desarrollo humano más bajo de la región centroamericana. Según los datos del 2007, de cada 100 hogares 60 viven por debajo de la línea de la pobreza y 35 de cada 100, en la pobreza extrema. Desde luego, como siempre sucede, estas cifras se agravan en el ámbito rural, donde 65 de cada 100 hogares viven en la pobreza y 52, en la pobreza extrema. A partir de eso, no les voy a indicar los índices de salud, alimentación, malnutrición infantil...
Por lo tanto, en este marco adoptaremos las medidas necesarias para poder manifestar y mantener una línea coherente de Gobierno, de rechazo absoluto a un golpe militar en Honduras y al establecimiento de un Gobierno dictatorial, pudiéndolo compaginar con el número de hombres, mujeres y niños que en estas condiciones se benefician de la cooperación internacional. Como muy bien saben ustedes, en América Latina somos los segundos donantes de la región, situándonos solo por detrás de los Estados Unidos y por delante de la Unión Europea en su conjunto. Por lo tanto, en este caso, nuestra presencia y las decisiones que tomemos al respecto son de vital importancia y de consecuencias directas para muchas personas. Creo que le he contestado a todo.
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