Fuente: ABC
Con el récord mundial de más de 80 homicidios por cada 100.000 habitantes, se sitúa por delante de países en guerra como Afganistán o Irak.
Las frías estadísticas se convierten en señal de alarma en Centroamérica donde, según el estudio, «el aumento de las tasas de homicidios está cerca de un punto de crisis». La presencia descontrolada de armas de fuego (responsable en esta región de tres de cada cuatro crímenes mortales ) son el brazo ejecutor de un problema que, según la ONU, tiene trasfondo económico y social: Los países con mayores desigualdades de ingresos tienen cuatro veces más probabilidades de sufrir delitos violentos que las sociedades más equitativas. Por el contrario, el crecimiento económico y la fortaleza institucional contribuyen a evitarlos.
Según la Unodc, las mayores tasas de homicidios se dan en Honduras (6.200 asesinatos para una población que no llega a 8 millones de habitantes: 82,1 por cada 100.000 habitantes), El Salvador (66 por cada 100.000 habitantes), Costa de Marfil (56,9), Jamaica (52,1), Venezuela (49), Belice (41,7) y Guatemala (41,4). «En países con altas tasas de homicidio, sobre todo con armas de fuego, como los de Centroamérica, uno de cada cincuenta hombres mayores de 20 años morirá antes de alcanzar la edad de 31 años», asegura el estudio.
Honduras también aparece a la cabeza de la violencia en otro estudio. Este país centroamericano, con una tasa de homicidios prevista a finales de año de 86 por cada 100.000 habitantes, se sitúa por delante de países en guerra como Irak o Afganistán, según el informe del Observatorio de la Violencia hecho público este jueves.